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Zona: Alto Aller
Asturias

Ruta de los Pinganones

Cuevas,10/2012

JFCamina,01/2013

 

Ruta de los Pinganones

Mapas: IGN 79-I "Felechosa"

Inicio y fin : Cuevas, Concejo de Aller, Asturias

Objetivos: Pinganón de La Foz y Pinganón de La Mornera

Recorrido: Cuevas - Puente La Muñeca – A.R. Fuente Las Moyas (760) - Los Cuadrazos (854 m.a.) - Collá Celleros (1000 m.a.) - Casa Nueva (1060 m.a.) - La Campona (1110 m.a.) - Fuentina de Casa Vieya y Cabaña Luis Tejón (1120 m.a.) - El Navayó e inicios Bosque Taio (1110 m.a.) - Arroyo Cuervu (1063 m.a.) - Cantu cambio vertiente (1275 m.a.) - Mirador El Pinganón de La Foz o de La Tabierna (1259 m.a.) - Cruce del arroyo Freno o Piornosa (1295 m.a.) - Collau La Tabierna (1383 m.a.) - Las Ordaliegas (1244 m.a.) - La Mornera y Fte. Los Esplones (1178 m.a.) - Mirador Pinganón de La Mornera y paso de Escuyu del Zarréu (1179 m.a.) - Collau La Palanca (1134 m.a.) - Collá Cebarón y Pista hacia Murias (1033 m.a.) - Camín hacia La Prialiega (872 m.a.) - La Prialiega (845 m.a.) - Enlace de pista de Murias (771 m.a.) - Los Faracones (708 m.a.) - Cuevas - Puente La Muñeca y .R. Fte. Las Moñas (760).

Distancia: ± 15,0 Kilómetros Circulares

Tiempos: 6 h. 00' / Desnivel: 800 mts. de ascensos y su correspondiente descenso.

Terreno: Caminos montañeros y un poco de pista.

Señalización: Si, hasta Las Ordaliegas, PR AS-30 "Ruta de las Brañas Alleranas".

Creative Commons License


Creo que casi todos los aficionados a caminar por la montaña habéis oído hablar del PR AS-30 “Ruta Allerana de las Brañas” y que la misma tiene una serie de variaciones que la hacen realmente muy atractiva, desde ascender al mítico y castigador Pico Retriñón o realizar excelentes rutas circulares concéntricas, de tal manera que parece un auténtico “Anillo Olímpico” del Senderismo Astur. Nosotros ya hemos realizado unas cuantas, igual casi todas, además en diversas condiciones meteorológicas, en guapos días de sol, con la nieve en los caminos, con toda la hoja en el suelo, etc… La última variación que realizamos, la que ahora nos ocupa, en plena estación otoñal, fue tomando como referencia dos famosos Pinganones, otras tantas preciosas brañas, un precioso bosque y un río, ¡alguien da más!. Todo ello partiendo y finalizando en la conocida fuente de las Moyás en Cuevas, en el puente de la Muñeca, por encima de Felechosa. Ni que decir tiene que todo muy guapo y prestoso, como la impresionante zona por la que transitamos. Para nuestro y vuestro deleite, aquí os dejamos el reportaje de tan interesante actividad andariega por tierras del Alto Aller.

(01 Cuevas, A.R. Fte. Las Moyas, Aller - Asturias, ± 0,0 K - 11:00 H. / ± 15,0 K - 18:00 H. / 760 m.a.)

Hacía menos de un mes que había estado en la fuente de las Moyas para realizar la PR AS-30, pero en aquella ocasión me quedé con las ganas de ver con los guapos colores otoñales el bosque del Tayiu, a la vera del río Cuervo, por lo que hice votos por volver. Efectivamente, no tardando mucho, allí me encontraba con la habitual compañía andariega más un compañero de excepción e íbamos a volver a tener la suerte de contar con la experiencia de Gerardo, el güelu de los mis sobrinotes Gerardin y Alex, además de padre del compañero Ángel. Todo ello apuntaba que iba ser un buen día, a pesar de que las previsiones no eran muy halagüeñas.

(Parcialmente el PR AS-30 "Ruta de las Brañas Alleranas" será nuestro guía)

(Dejando Cuevas a nuestra derecha, tomamos camín rumbo NorEste)

El recorrido elegido era un tanto especial, siguiendo, hasta mitad del recorrido, de la señalización de PR-30, realizaríamos un guapo circuito entre los dos pinganones de la zona, claro que, sin dejar de pasar por el ahora sí cromático bosque del Tayiu, nombre que aprendimos precisamente en esta jornada andariega. Así que sin muchos más preámbulos comenzamos a transitar por la “Ruta Allerana de las Brañas”, dejando Cuevas y los guapos bosque que la rodean a nuestras espaldas.

(02 Los Cuadrazos, ± 0,7 K - 10' 854 m.a. )

Así que sin muchos problemas nos hidratamos un poco en la fuente de la zona de Los Cruadros, donde tenemos donde elegir: la tradicional o la típica y singular bañera reciclada, a gusto del consumidor, pues las dos “pingan” algo de agua, el caso es tomar un poco de fuerza adicional para adentrarnos caleya arriba.

Las previsiones meteorológicas hablaban de que llovería hacia la tarde, aunque esto no lo teníamos muy claro que así fuera, por la vertiente del puerto se aproximaba una gris cortina que barruntaba agua, pero no por eso íbamos a desistir, si llegaba antes de lo previsto teníamos una opción más corta, la de bajar por la zona de El Yanón, una de las primeras opciones andariegas realizada por nosotros hace un buen número de años. Así que tras contemplar el húmedo avance y los caballos tranquilamente pastando afrontamos el pequeño esfuerzo que nos deja en la collá de Celleros.

(Por el puerto viene una húmeda cortina, no se si nos mojaresmos antes de los previsto)

(Así que mejor centrarse en lo que tenemos más cerca)

(03 Collá Celleros, ± 1,7 K - 45' - 1000 m.a.)

Ya en Celleros toca enseñarle a Manuel algo nuevo para sus ojos, pues es el único que no ha caminado por esta zona, no así sus hijos. Le mostramos el gran vigía del Retriñón, el rey de este paraje acompañado de su sequito, la Muezca y Tabierna. Por debajo de todas estas picachas pasaremos, afirmación que le pareció un tanto aventurada, no tenía mucha confianza de que la cortina de agua que llevamos a nuestras espaldas nos lo permitiera. Así con cierta incertidumbre seguimos la marcha tomando el camín de la derecha, un artesanal cartel así nos informa.

(Un guapo marco de "fueyas" otoñales para el Retriñon, la Muezca y la Tabierna)

(Ahora el camín va mucho más relajado, muy apropiado para la contemplación y disfrute)

Dejada atrás la collá de Celleros, el camín va mucho más relajado, muy apropiado para la contemplación y disfrute, las típicas cabanas alleranas, las hojas otoñales en el suelo hace que el transitar sea mucho más suave, además, con las últimas lluvias las setas ha salido a nuestro paso, verdaderamente las echábamos mucho de menos, parece que faltaba algo en los bosques y caminos por los cuales solemos transitar, sin ellas estaban un poco vacios.

(Las hojas sobre el camín, aderezadas de las setas otoñales, hace el avance mucho más placentero)

Caen unas gotitas pero, de momento, no llueve, aunque las negras nubes sobre el pico La Mota no nos aventura nada bueno, pero a pesar de la húmeda oscuridad parece que tenemos una guapa estampa otoñal, le falta un rayos de sol para darle unos puntos extras. De esta guapa manera seguimos descontando brañas en nuestra amplia lista de hoy, así dejamos atrás Casa Nueva y las blancas cabanas de La Campona, todo ello sin ninguna dificultad, siguiendo la señalización amarilla y blanca del PR que hoy nos guía.

(Otoñal visión del pico La Mota, de unos 1206 m.a.)

(04 Casa Nueva, ± 2,6 K - 1 H. - 1060 m.a.)

(05 La Campona, ± 2,8 K - 1 H. 15' - 1110 m.a.)

En animada conversación sobre temas montañeros alcanzamos la fuentina de Casavieya, donde volvemos a hidratarnos un poco, aparte de cotillearla un poco. Como debe ser obligación llevamos nuestras cantimploras llenas de agua, a pesar de que sabemos que por aquí contamos con numerosas fuentes, pero no hay que confiar, cualquier día nos llevamos una desagradable sorpresa y encontramos que las mismas no “pingan”.

(Un llamativo y moderno letrero nos indica que estamos cerca de la fuentina de Casavieya)

(06 Casa Vieya – Fuente, Cabaña Luis Tejón, ± 3,1 K - 1 H. 20' - 1120 m.a.)

Unos metros más allá de la fuentina el camín pasa por encima de la cabana de Luis Tejón, su blanca y esbelta chimenea la delata. En la anterior ocasión que por aquí pasé no me paré, pero desde lejos observé un letrero en el alero del tejado, ya en casa, leí que nos informaba que dentro teníamos un libro de visitas, así que era hora de escribir algo en él.

(Casa Vieya - cabaña de Luis Tejón)

Entramos en la corrá y en la antojana vemos que había mucha literatura, lo primero el su cartel, en el que decía que si te apetecía escribir algo allí estaba el libro de visitas, además que si tienes hambre o fríu puedes entrar en la cabana, pero para decirte donde está guarda la llave de la misma tienes que llamarlo a él al móvil, deja constancia escrita del número. Después un guapo recorte de prensa escrito por Pablo Texón Castaño titulado: Mio güela (1922 -2007), el libro de visites donde cuenta la historia de la cabaña y un montón de anotaciones. En fin, mucho entretenimiento, nosotros dejamos un pequeño agradecimiento y seguimos ruta, si nos paramos más… ¡nun llegamos a casa!, tenemos que llamar al movil, se nos fai de noche.

(Poco a poco vamos cambiando rumbo, orientándonos más al Norte)

(07 Collá Navalloz - Bosque Taio, ± 3,5 K - 1 H. 30' - 1100 m.a.)

Sin apenas darnos cuenta, poco a poco vamos cambiando rumbo, orientándonos más al Norte, así llegamos a la zona de Navayó y tras descender un poco y volver a recurperlo un poco más adelante, nos adentramos en el bosque deseado, en principio, la motivación de la excursión de hoy.

(Comenzamos la travesía del Bosque Taio)

Realmente no es un trayecto muy largo, una pequeña travesía, a media ladera baja del monte Taio ó Tayiu, asunto que siempre es un poco complicado de saber cuál es el mejor vocablo, un servidor cuando preguntó le costó trabajo memorízalo, lo apunté tal como sonaba, cuando llegué a casa comprobé en diversos mapa y de las dos formas encontré, arriesgo de que alguien diga algo en contra.... así que aquí queda.

Nos encontrábamos, bajo mi humilde punto de vista, en un paraje un tanto especial, no tan grande y famoso como otros pero sí muy guapo e interesante, así que me desaté sacando un montón de fotos, la verdad que estaba muy guapo y en el punto cromático otoñal que uno esperaba, una pena que no hiciera un poco de sol, seguro que con los rayinos solares iluminando las hojas estaría mucho más mágico pero bastante suerte teníamos con que no lloviera.

(Al fín logramos alcanzarlo en su punto cromático otoñal, aunque con unos rayinos de sol....)

Cuando me di cuenta estaba solo ante las esbeltas fayas, así que tuve que aligerar el paso para alcanzar a mis compañeros, no hizo falta correr mucho, al final del bosque estaba Ángel esperándome, aunque los otros dos “galgos” ya iban un poco alejados. Persiguiendo a nuestra adelantada compañía cruzamos el seco caudal del río Cuervu, el cual “nace” un poco más arriba, en la zona de las Chaguniechas. Parece mentira que cuando acabemos la ruta veamos verter sus aguas al río San Isidro o Braña con cierta fuerza, realmente no parece el mismo, pero ye lo que tiene esta zona, va recogiendo todos los “pingos”, de tal manera por debajo de Muries, ya tiene un buen chorrón que aportar al río principal.

(Toca apresurarse un poco para pillar a la gente y "cruzar" el Cuervu)

(08 Río Cuevu - Fin Bosque, ± 4,0 K - 1 H. 45' - 1063 m.a.)

Dejado atrás el bosque y las secas piedras del Cuervu toca afrontar la parte más fea de este recorrido, la carba de la Llomba. Ahora parece que empieza a llover con cierta gracia, antes de llegar al desvío a la izquierda que nos bajaría al Yanón y Muries alcanzamos a los compañeros, están preparándose para la lluvia, a pesar de ella no renuncian a seguir ruta, así que afrontamos la dura subida que nos permitirá ver el pinganón de La Foz.

(Iniciamos la subida por la carba de la Llomba, a izquierda sale el desvio hacia el Yanón y Muries)

(Peña de Chaguniecha y bosque Taio o de'l Tayiu)

(Vista lateral de la zona por la cual hemos transitado, la cortina de agua nos ha alcanzado)

En verdad que el agua sirvió de acicate, nos dio un plus de fuerzas para subir como “la posta”, solo una mirada hacia atrás para observar el bosque que dejamos y las singulares peñas de la Chaguniechas, una pena que el agua nos alcanzara. Así, con ciertos lamentos, alcanzamos el canto que “voltia” para la otra ladera de la Llomba y nos da la entrada a La Foz del río Freno o de la Piornosa.

(El agua parece que nos impulsó y pronto alcanzamos el canto)

(09 Cantu cambio de ladera, ± 5,3 K - 2 H. 15' - 1275 m.a.)

Alcanzado el canto la luz volvió, paró de llover y parece que el sol quiere salir, ¡menudo cambio!, parece que nos quería poner a prueba. Ahora, con mejor luz, tenemos unas vistas espectaculares, a nuestros pies, la buena taya (¿taío?), parece que si te metes en ella no sales, aunque al compañero Ángel lo que realmente le interesaba era una picacha que asomaba con fuerza desde lo más lejano, era el Estorbín de Valverde, máxima altitud de nuestro concejo de Aller.

(La taya hacia el valle y, en la lejanía, en lo más alto....)

(El Estorbín de Valverde, con sus 2.123 m.a. resulta la cumbre más alta del Concejo de Aller)

Con animada charla de la vez que nosotros nos aupamos a la cumbre el Estorbín, aderezada de las diversas variantes realizadas por Gerardo, comenzamos a descender hacia el tajo que el arroyo que baja de la Piornosa horadó en las rocas de las laderas de la LLomba y del Pico la Mola, este último destaca por sus escarpadas agujas y porque detrás de ellas se resguarda la braña a la que nos dirigimos, la Tabierna, la cual también descansa a los pies de la peña que le da nombre y la cual no nos pierde ojo.

(Encarando la entrada a La Foz ante la atenta y silenciosa "supervisión" de la Peña de la Tabierna)

Con cierto cuidado, ya que el terreno es abrupto y con el agua se ha vuelto un tanto resbaladizo, alcanzamos un punto donde vemos casi perfecto el Pinganón deseado, no obstante nos desviamos un poco de camín principal para sacar una guapa foto sobre un canto cercano, se nota que está muy transitado, el terreno está muy machacado. Tomamos unas cuantas fotos, no muchas, a pesar de que quiere abrir, el cielo aún está muy gris, además el chorro de agua no es grande, solo un pequeño “filo” que se deja caer entre la roca, una pena pero… ¡ye lo que hoy toca!, otro día igual tenemos más suerte.

(10 Mirador Pinganón La Foz del arroyo Freno o Piornosa, ± 5,6 K - 2 H. 30' - 1259 m.a.)

Como este es un recorrido que nos encanta a él volvemos una vez al año por lo que tenemos mucha documentación al respecto y especificamente dedicada a la visualización de este precioso pinganón y sobre todo en época húmeda donde la caida de agua es importante, no menguada como en este reportaje nos tocó en suerte. Así que aquí os compartimos un video y acceso directo a uno de nuestros reportajes sobre el Pinganón de La Foz o Tabierna.

 

(Video del Pinganón de La Foz o Tabierna cuando tira fuerte)

Tras la fotos de rigor volvemos al PR AS-30 y afrontamos el cruce del arroyo de la Piornosa, a nuestra derecha dejamos la guapa collá que da nombre al arroyo, la cual divide administrativamente a los vecinos concejo de Aller y Caso. Definitivamente le damos la espada a todo lo anteriormente mencionado y, afrontando la última subida de la jornada, alcanzamos las cabanas de la Tabierna, las cuales no hace falta decir que están todas muy curiosas, como todas por las que hemos pasado hoy.

(11 Cruce de arroyo Fresno o Piornosa, a la izquierda, hacia la Tabierna, ± 6,1 K - 2 H. 45' - 1295 m.a.)

(La última subidina del día y alcanzamos las cabanas de la Tabierna)

(Cabanas de la Tabierna con la vista de la collá de la Piornosa y demás picachas vecinas)

(12 Collá La Tabierna, ± 6,6 K - 3 H. - 1383 m.a.)

No paramos mucho en torno a las cabanas y subimos hasta la gran fuente del collau de la Tabierna, punto de máxima altitud del día, unos 1390 metros. Aún no son las dos de la tarde, un poco temprano para comer el bocata, así que decidimos comenzar a bajar hasta la siguiente braña, la de Las Ordaliegas, allí, lo comeríamos y, si tenemos ganas y tiempo, podemos intentar arrimarnos hasta la cueva del Retriñón, aunque esta propuesta, bueno digamos, “propina”, no tiene mucha aceptación, solamente Gerardo y un servidor están por ello. Este tramo andariego entre la collá La Tabierna y Las Ordaliegas está casi siempre muy húmedo, así que hay que estar muy atento al terreno de barro resbaladizo y pantanoso.

(Alcanzado el punto más alto de la jornada, ahora toca... ¡todo bajar!)

El camín de bajada a Las Ordaliegas va muy bien, pero hoy con el agua, tiene cierta peligrosidad, el terreno arcilloso está muy resbaladizo, asi que tenemos que apoyarnos con en el bastón para, en algunos puntos, no perder el equilibrio. Así, haciendo algún malabar que otro, y ante la atenta mirada de los caballos, entramos en la braña, además de en compañía de un sol radiante, tema que se agradece para comer el bocata bien a gustito y sacar unas guapas fotos de grupo.

(13 Las Ordaliegas, ± 8,3 K - 1245 m.a. - 14:00 - 15:00 h. - 1244 m.a.)

Una hora nos relajamos en la antojana de una cabana comiendo y platicando, la verdad que el calorcillo solar daba pie a ello. Visto el tiempo empleado estaba claro que la idea de ir hasta la vecina braña de L’Otero y arrimarnos hasta la cueva del Retriñón ya no procedía, ya estamos en horario de invierno y no es conveniente aventurase mucho, la noche nos cae por los caminos en un momento.

(Antes de abandonar Las Ordaliegas probamos el agua su gran fuente-bebedero, parece una piscina)

A las tres de la tarde le decimos adiós a la majada de Las Ordaliegas, a sus guapos caballos y a la señalización del PR AS-30 que también nos ha guiado hasta aquí, ahora toca olvidarse de sus marcas y tomando rumbo Oeste-Sur adentrarnos en la foz La Mornera y el paso del Escuyu del Zarréu.

(Ahora toda dejar a nuestra derecha la señalizacion del PR AS-30 y bajar por La Mornera)

(14 La Mornera y Fte. Esplones, ± 8,4 K - 3 H. 40' - 1178 m.a.)

Pasamos al lado de una guapa fuente, situada en frente de las cabañas y nos adentramos en el arroyo, hoy, debido a la escasez de agua, con cierta facilidad pasamos por él que recoge las aguas que nacen esta vertiente Nor-Occidental del collá de la Tabierna más las que vienen del valle de Chirrial, el cual sigue por la señalización recientemente abandonada. El agua recogida se deja caer formando el otro pinganón el cual coge el nombre de la braña que dejamos tras nuestro.

El curso de agua no es muy grande y no lo percibimos a penas, así que de ver el pinganón caer con cierta fuerza… ¡nada de nada!, una pena recordamos cuando lo vimos por primera vez, era realmente impresionante, ver cómo caía el agua desde donde hora estamos hasta casi las cabanas de Murias, era todo un espectáculo, pero estaba claro que hoy no era el mejor día, había llovido pero no lo suficiente.

(Pinganón de La Mornera y valle del ríu Cuevu)

A falta de pan bueno son…. , así que ya que no contemplábamos caer el agua nos deleitábamos viendo desde nuestra especial atalaya todo el valle del ríu Cuervu, entre los guapos colores otoñales y los verdes rabiosos de las recientes lluvias caídas nos dejaban un precioso cuadro natural, además con un pétreo marco.

(Paso del Escuyu del Zarréu)

(15 Pinganón La Mornera y Escuyu del Zarréu, ± 9 K - 3 H. 50' - 1179 m.a.)

Gerardo nos comentaba que lateralmente había una vereda montañera que bajaba paralelo al pinganón, nos marcó el jitu, nos invitaba a bajar por ella, pero nosotros más prudentes que “aguerridos” montañeros preferimos seguir. Su información no cayó en saco roto y unos años después en compañía de Mary, desde la zona de Murias subimos para arriba por el camín que nos indicaba y disfrutamos de toda la gran caida de agua del Pinganón de La Mornera, recorrido que podéis disfrutar de un reportaje que realizamos al respecto titulado "Pinganón de La Mornera" también podéis ver el video que grabamos de toda la subida en una época bastante húmerda así que...

 

(Video del Pinganón de La Mornera tirando mucho agua)

Con una pequeña subida, salimos de la zona de influencia de La Mornera y comenzamso a bajar a media ladera del pico Llacíu en cómoda marcha hacia la zona del collau de la Palanca, travesía que resulta muy disfrutona, dejándonos unas guapas postales otoñales de los bosques de la zona.

(En cómoda travesía a media ladera del pico Llacíu vamos cubriendo otro largo más)

(Este balcón, por el que ahora vamos, nos permite observar con cierta ventaja los bosques vecinos)

Llegamos al collau de La Palanca, divisamos claramente toda la pista que baja desde Cebarón hasta Murias y el ríu Cuervu, nuestros próximos objetivos. Gerardo nos comenta que se ve o intuye el camín tradicional, aunque la pista igual deshizo parte de él, trataremos de ver si lo cogemos en algún punto.

(16 Collau La Palanca, ± 10,0 K - 4 H 15' - 1134 m.a.)

Llega un momento que es inevitable hacer un alto en el camino, al fondo, al Sur, en nuestra perpendicular, entre el pico La Mota y el Pisones, reguero Cellero arriba, divisamos las blancas cabanas de La Campona, un poco más a la izquierda, la zona del bosque de Taio y la Chaguniecha, un grandioso resumen. -¡Uff, cuanto andamos!, efectivamente parece mentira, menuda vuelta que hemos dado sin darnos cuenta, realmente preciosa, una pena que el sol no nos hiciera compañía todo el tiempo, solo a la hora del bocata.

(Hora de resumir el recorrido fotográficamente)

Tras los momentos contemplativos del recorrido realizado toca llegar a la encrucijada de caminos que es la collá de Cebarón. Según llegamos, a nuestra derecha, hacia Mayaín, un poco más abajo, también con desvío a derecha, la bajada directa por camín hasta Felechosa, pero nosotros bajamos por la pista, en busca de un ramal que nos permita “atayar” terreno y no dar la vuelta hasta la cabanas de Muries.

(17 Collau Cebarón, ± 10,6 K - 4 H. 30' - 1033 m.a.)

(Pista p'abajo hacia Muries)

Descendemos muy cómodos por la pista, sin dejar de mirar a nuestra derecha por si el camín aparecía, vemos una entrada, parece que se tapa, no queremos arriesgarnos a entrar en ella y después dar la vuelta así que seguimos por la ancha pista, damos un par de amplias curvas y, con la familiar imagen del terreno que habíamos transitado por la mañana en lo alto, nos damos cuenta que a nuestra derecha baja un camín hacia una cabana y sigue, Gerardo se adentra en él y nosotros detrás de él que vamos.

(18 Abandono pista a Murias para bajar por el camín a la Prialiega, ± 12,1 K - 4 H. 50' - 872 m.a.)

El camín tiene muy buena pinta, es el buscado, ahora solo queda dejarse caer por la otoñal traza, además la misma nos ofrece unos guapos parajes a fotografiar, aunque de esto creo que vamos bien servidos. Pasamos al lado de unas cabanas y la senda sigue bajando incluso empedrada, así, en un momento nos plantamos en otra agrupación de cabanas, donde un lugareño está a sus labores, el cual precisamente conoce el padre de Ángel.

(Con estes cabanes aquí ye raro que el camín se pierda, pensamos)

(Estaba claro que, con este guía que hoy nos tocó en suerte.... ¡a buen sitio ibamos a llegar!)

(19 La Prialiega, ± 12,6 K 5 H. - 845 m.a.)

Estaba claro que, con este guía que hoy nos tocó en suerte.... ¡a buen sitio ibamos a llegar!, decía Manuel. Nada más llegar entablamos conversación y preguntamos cómo se llamaba el lugar, La Prialiega, dijo, y por aquí baja el camín a la pista, así os ahorráis más de kilómetro y medio. Cuando íbamos a marchar dijo que esperáramos por él que bajaba con nosotros, se arrima a una cabana y coge un saco de cincuenta kilos al hombro junto con un cesto y la foceta, así bajamos por un ancho caleyu hasta la pista.

(Al fondo parte del otoñal recorrido realizado, ahora en buena compañía hasta casi el ríu Cuevu)

(20 Pista La Calavera - Murias, ± 12,9 K 5 H. 15' - 771 m.a.)

En esforzada compañía bajamos casi hasta el ríu Cuervu, húmedo eje de la zona, habíamos enlazado de nuevo con la pista, nos habíamos ahorrado unas cuantas revueltas. Charramos otro rato, preguntamos sobre el bosque que habíamos pasado por la mañana, así como la procedencia de las marcas “rosa-naranja”, ya lo intuíamos, eran las del “Trail Alto Aller 2012”, el cual se había celebrado recientemente con muy mal tiempo. Como suele ocurrir en este tipo de encuentros, nos despedimos mandando recuerdos para la familia y demás conocido, tras realizarlo afrontamos el último sector del día, bajar hasta el río y llegar al punto de partida mañanero.

Contemplando el guapo bosque que desciende vertiginosamente desde el Pico Pandos y peña Melera, al otro lado del río San Isidro o Braña, sin apenas darnos cuenta, tenemos que abandonar la pista que nos llevaría, paralelos a la carretera AS-253, hasta la ermita de la Virgen de las Angustias de Felechosa, pero nosotros no queremos ir al Nor-Oeste, nuestro coche está al Sur-Este, así que en Los Foracones, casi a la altura de la piscifactoría, recortamos bruscamente y cruzamos el ríu Cuervu, aquí ya con muy buen caudal de agua.

(21 Los Faracones, ± 13,8 K - 5 H. 30' - 708 m.a.)

(Ríu Cuervu, aquí ya lleva buen caudal de agua)

El kilómetro y poco que nos queda para finalizar este precioso recorrido es “coser y cantar”, bueno en nuestro caso sería de “repaso del mapa”, su cómoda travesía, por detrás de la piscifactoria y la embotelladora de “Agua de Cuevas” se presta a ello, un buen momento para observar el recorrido circular que hemos realizado en torno a los pinganones, que aunque no estuvieron generosos en húmeda espectacularidad nos gustó como si así fuera. Un excelente momento para compartir el mapa del IGN que portábamos con el recorrido impreso sobre él. También, fruto de otras ocasiones andarigas posteriores por la zona, la más reciente en la primavera del 2020, también aprovechamos la ocasión para compartir el "Track" grabado con los 21 puntos que consideremos de máximo interes y que incluyen fotografía mucho mejores y más actuales. Advertir que queda a la responsabilidad de cada uno la utilización correcta del mismo, además de tomar todas las medidas de seguridad apropiadas para cada dificultad, que dependerán de muchas condiciones, entre ellas el estado del terreno, la altitud, la meteorología, etc... Así como la preparación tanto técnica como física de las personas que realicen la actividad. También lo relacionado con la legislación administrativa y ambiental del espacio donde nos estamos moviendo.

(Nuestra "Ruta de los Pinganones", variante del PR AS-30 / ‘© INSTITUTO GEOGRÁFICO NACIONAL’)

 

(Si tienes algún problema en la visualización pincha este enlace para una visualización directa)

(Ubicación de los dos pinganones sobre fotografía de la última andanza en Junio'20)

Visto el mapa podemos observar la gran variedad de Brañas y vagüadas por las que pasamos, así como las diversas picachas que circunvalamos, sin lugar un recorrido senderista espectacular, ideal para dejarse llevar y disfrutar de lo lindo, como nosotros hemos hecho hoy, o al menos con esa sensación que nos vamos, que es lo verdaderamente importante.

Tras repasar el mapa y "un poco más", solo queda llegar al punto de partida, al Puente de la Muñeca, ¡que recuerdos me trae a la cabeza este, ahora, aparcado puente. Tras seis disfrutonas horas de marcha, unos quince kilómetros recorridos y 800 metros de desnivel positivo, al cual debemos de añadir el negativo, toca cambiar el calzado y tomar el habitual refresco en un bar de la zona, por hoy ya estado requetebién.

(01 Cuevas, A.R. Fte. Las Moyas, Aller - Asturias, ± 0,0 K - 11:00 H. / ± 15,0 K - 18:00 H. / 760 m.a.)

Tras finalizar el reportaje que hoy nos ocupa, creemos que ha quedado bien a las claras que lo escrito en el párrafo inicial de este reportaje, eso de: “Anillo Olímpico” del Senderismo Astur, puede resultar un poco fuerte, aunque cada vez que calzamos las botas en esta preciosa zona del Alto Aller, estamos mucho más convencidos. Por si alguno, al otro lado del terminal, no lo tiene claro date una vuelta por el nuestro cajón: "Rutas por Aller", en la "Zona Alta" observarás que en un radio bien pequeño, uno puede realizar y, lo más importante, disfrutar de ellos. Seguro que tras su visionado habéis cambiado de opinión o ¿no?

JFCamina

 

Por si se os pasó los reportajes específicos de nuestras visitas directas a los dos pinganones que hoy hemos enlazado, aquí os dejamos los dos accesos directos al respecto.

(Visita directa al Pinganón de La Foz)

(Visita directa al Pinganón de La Mornera)


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* Para volver a ver otra ruta cliclea aqui: www.jfcamina.es o "Rutas por Aller"

* Aviso: En estos documentos solo tratamos de narrar la experiencia personal vivida al realizar nuestros recorridos, los itinerarios que aquí describimos son orientativos. Queda a la responsabilidad de quien realice la ruta el tomar las medidas de seguridad apropiadas para cada dificultad, que dependerán muchas condiciones, entre ellas el estado del terreno, la altitud, la meteorología, etc... así como la preparación tanto técnica como física de las personas que realicen la actividad.