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Picos
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C. Onís, 12/2012 |
JFCamina, 01/2013 |
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C. Onís, 12/2012 |
JFCamina, 01/2013 |
De Corao a Covadonga por....
La Cruz de Priena
Mapas IGN: 31-III "Cangas de Onís" (2000) y 55-I "Sames" (2002)
Objetivos Principales: La Cruz de Priena y Santuario de Covadonga.
Recorrido: Corao (95 m.a.) - Santa Eulalia de Abamia (185 m.a.) - Cueto Abamia (220 m.a.) - La Cañal (320 m.a.) - Portilla y paso canadiense del Tombonu (400 m.a.) - Cantu y depósigo agua (480 m.a.) - Monte Orientes (490 m.a.) - La Paniella (500 m.a.) - Collau el Pasadero (600 m.a.) - Cruz de Priena (725 m.a.) - Retroceso hacia el collau Pasadero desvio hacia Covadonga (700 m.a.) - Cuestas de Ginés (585 m.a.) - Real Sitio de Covadonga (190 m.a.).
Distancia: ± 11,0 Kilómetros = 7 + 4
Tiempos: 3 horas y 15 minutos = 3 h. 15' + 1 h.
Desnivel: 630 mts. de ascenso y 535 mts. para el descenso.
Terrenos: Pista y vereda montañera.
Señalización: Parcialmente Sí, PR PNPE 1 "Senda de Frassinelli" hasta Uporquera
En varias ocasiones nos hemos acercado hasta este simbólico paraje, siempre en compañía de amigos, en recorridos de ida y vuelta o circulares. Ahora, con el fin de cerrar el año montañero con nuestro nutrido grupo “"Family-Amigues", pensamos que sería guapo hacerlo en travesía, desde Corao a Covadonga pasando por Abamia y la Cruz de Priena. Así que tocamos a “conceyu” y a las 10:45 h. de una fría mañana del día de los Santos Inocentes nos concentramos todos los que pudimos en la gasolinera del Remedio, por tierras de Nava, ya “enfocaos” carretera a Cangas de Onís y Cabrales, aunque nuestro objetivo sería el pueblo de Corao.
Tal como anticipe el recorrido era en travesía, desde Corao al Real Sitio de Covadonga, así que tuvimos la precaución de llevar un coche “a mayores”, con el fin de, una vez terminada la marcha a los pies de “La Santina”, para ello, poco después de dejar atrás Cangas de Onís, antes de coger la carretera que nos lleva al Concejo de Cabrales, dos de los coches nos desviamos hacia Covadonga para dejar uno allí estacionada para al finalizar volver por el resto de coches, otra solución sería coger un taxi pero nos gusta movernos con medio propios, aunque es una buena solucción si se va con poca compañía.
(Corao, Concejo Cangas Onís, Asturias, ± 0,0 K / 95 m.a. / 11:00 h.)
Cuando nos reunimos todos al lado de la singular plaza del mercado de ganado de Corao, es decir, nada de un gran edificio que parece un pabellón polideportivo, sino una cosa como las de antes, unos “argadieyos” para amarrar las reses y, aparte de unos buenos castaños para dar sombra, poco más existe, un cosa sencilla y natural. Como la mañana, aunque soleada, está muy fría no paramos mucho, vamos directos hacia el comienzo de ruta, caminamos un poco en dirección occidental, por donde llegamos, y al poco, justo a la altura del bar-tienda, vemos un giro a la izquierda, pronto unas señales de GR y PR, a parte de la silueta de "La Santina".
Al poco llegamos al panel del recorrido y vemos que el mismo no figura la Ruta a la Cruz de Priena, sino el PR PNPE 1 "Senda de Frassinelli" el cual sube hasta los Lagos de Covadonga. Empiezan los cachondeos con el “tiu” Félix, rápidamente les aclaro que es el mismo recorrido, aunque el nuestro mucho más pequeño, nosotros dejaremos “La Frassinelli” a la altura de las cabañas de Uporquera, en la falda NorOriental de la montaña que vamos subir.
(PR PNPE 1 "Senda de Frassinelli", aunque nos lo abandonaremos a la altura de Unporquera)
Tras la “chanzas” iniciales toca frotar las manos, ponerse a caminar y cruzar el puente sobre el río Güeña, después seguir por cómoda traza adelante tratando de imprimir un poco de marcha porque estamos en zona de penumbra y tenemos que entrar en calor haciendo ejercicio y saliendo pronto a la solana, así que sin apenas darnos cuenta nos plantamos en el histórico paraje de Abamia, donde el sol brilla con cierta tibieza mañanera, lo que quiere decir, no calentaba mucho.
(La fría mañana invita a dar un poco de alegría al cuerpo, hay que buscar el sol rápidamente)
Como casi todo lo que data de la Edad Media, Santa Eulalia de Abamia es un lugar histórico y cargado de mucho simbolismo y también de alguna leyenda que otra, aunque en el gran letrero de la entrada figura que estamos ante un edificio del los siglos XIII-XIV, sus antecedentes son mucho más antiguos, hablan de un dolmen, de un monte famoso, etc... Nosotros vamos centrarnos en lo que nos cuentan el panel que allí hay con el fin de informar al caminante, el cual dice que fue mandada construir por Pelayo y en ella fueron enterrados él junto a su esposa Gaudiosa, después, a instancias de Alfonso X El Sabio, en el siglo XIII, los restos fueron trasladados a la Santa Cueva de Covadonga.
(Santa Eulalia de Abamia, ± 1,2 K / 185 m.a. / 11:25 h.)
La visita al lugar lleva su tiempo, hay mucho que ver e incluso que leer, estamos ante una excursión muy recomendable para toda persona que le agrade el arte, la historia, la naturaleza, en resumen, Asturias. Aquí lo tenemos todo, unos pórticos cargados de simbolismos, tres o cuatro Texos milenarios, aquí se encontraron dólmenes, ahora expuestos en un museo fuera de nuestro Principado, restos de un torreón, la tumba de Frassinelli ("El Alemán de Corao"), autor de la restauración de Covadonga a finales del siglo XIX, ¿necesitamos alguna cosa más para dedicarle unas horas de nuestro tiempo?
A la mayoría de la gente que por aquí pasa, nosotros no íbamos a ser diferentes, lo que más llama la atención son los relieves del pórtico más viejo, especialmente donde se observa a una persona siendo arrastrada por los pelos. Dicen que es el obispo Oppas arrastrado por los demonios al infierno, ponerse a explicar quien fue el famoso clérigo y porqué era arrastrado de esa manera nos llevaría mucho tiempo así que lo dejamos para el camino y prefiero centrarme en alguno de los guapos detalles, como la ventanina trasera.
(Oppás arrastrado hacia el infierno, ¿porqué?, ¿qué haría?)
(Santa Eulalia de Abamia, un paraje lleno de historia, leyenda y guapos detalles)
Este monumento histórico últimamente está muy de moda en la prensa por la remodelación de sus fachadas, el estucado que le han puesto los responsables de la restauración de tan emblemática joya arquitectónica no ha gustado mucho. Nosotros no vamos a entrar en la polémica, solo vamos a colgar un par de fotos tomadas en Marzo de 2006 para que comprobéis las diferencias, después cada uno que saque sus propias conclusiones, nosotros tenemos la nuestra ya formada pero nos la reservamos para no alimentar más el fuego.
Con cierto pesar vamos dejando atrás el histórico paraje de Abamia, debemos llegar a La Cruz sobre la hora de comer, no podemos liarnos mucho más, así que afrontamos la cuesta que nos lleva al Cuitu, aldea donde nos encontramos con una serie de “remocicadas” construcciones y algún guapo detalle, aún, tradicional, además de un “perrín” que nossalió a dar la bienvenida, al igual que unos gochinos que reclamaban nuestra atención desde la su cubil.
(Dejamos atrás la historia y afrontamos la cuestina que nos lleva al Cuitu)
(Cuitu Abamia, ± 1,8 K / 220 m.a. / 11:30 h.)
(Una lugar con aún guapos detalles tradiccionales)
El grupo formado por unas once personas es muy heterogéneo, especialmente en el tema de la edad, aunque a todos nos une la pasión por lo andariego y la aventura, no en vano realizamos esta marcha colectiva para despedir el año con las personas que habitualmente hacemos salidas, en mayor o menor frecuencia, aunque si llenas de intensidad. Como no podía ser de otra manera, el terceto juvenil marca la pauta a seguir. Ellos siempre los primeros y, al igual que los mayores, hablando de sus cosas, de vez en cuando, hacen la goma y confraternizan con los mayores, los cuales vamos más preocupados de las verdes praderías que vamos dejando tras nuestro.
(El terceto juvenil marca la marcha, el resto oteando los verdes horizontes)
Ya comentamos que la traza a seguir era clara y cómoda, aunque existe un punto, de cual se me había olvidado anticipar que probablemente habría barro, hacia la zona de Derroncabo, a él llegamos y nos tuvimos que arribar a la sebe para tratar de evitar mancharnos mucho, solo lo justo.
(Zona de Derroncabo, un tanto sombría y con barro habitualmente)
Tras dejar atrás la sombría zona de Derroncabo, en la que siempre hemos encontrado barro, alcanzamos un alto desde donde tenemos las primeras vistas claras de la montaña que queremos alcanzar, la cual queda a nuestra derecha, aunque el sol no favorece mucho para sacar una guapa foto, así que nos tenemos que conformar con otra del sentido contrario, la cual, además, resulta mucho más espectacular, una preciosa estampa de la cumbrera del Hibeu y un poco más al Oriente… ¡todo el Cuera!
(Dejamos el barro atrás y ahora toca ver de cerca el objetivo del día, aunque el sol no ayuda mucho)
(Como la vista a la derecha no es muy visible nos giramos a la izquierda para ver el Hibeu y el Cuera)
La pequeña cuesta del barro da paso a una zona tranquila, aunque no por mucho tiempo, que sirve de enlace con la pista que viene del pueblo cercano de Teleña, las verdes praderías invitan a relajarse un poco e insuflar un poco de aire para afrontar la cuestina de La Cañal, lugar donde una guapa casa nos ofrece numerosos y guapos detalles artesanales.
(El Cañal, ± 2,8 K / 320 m.a. / 12:05 h.)
(Después de los guapos detalles de la casina de La Cañal seguimos subiendo un poco más)
Tal como había anticipado a mis compañeros andariegos que hoy me acompañan el recorrido no entraña muchas dificultades, el mismo es bastante tendido, aunque puntualmente tenemos alguna pequeña cuesta que superar, aunque pronto el terreno vuelve a suavizarse, así hasta la zona que debemos abandonar la “Senda Frassinelli” y afrontar el largo de subir a La Cruz de Priena. Así que siguiendo esta tónica tras la cuestina de La Cañal viene un terreno más sueve, pasamos por el paso canadiense de Tombonu y después otro altillo hasta un canto donde ahora ubicaron un depósito de agua para extinguir incendios, de los cuales ya tenemos unos cuantos en nuestro recorrido.
(Portilla y paso canadiense del Tombonu, ± 3,6 K / 400 m.a. / 12:20 h.)
(Otra pequeña cuestina, los guajes van rezagados... ¡qué raro!)
(Vista sobre Teleña y la sierra La Escapa, Ordiales y Cuana)
En el canto del depósito hacemos una paradina para hidratarnos un poco y pillar algo solido, fue cuando Gerardo sacó unos dulces navideños de chocolate y los guajes se pusieron moraos, el resto también pero estábamos más centrados en el horizonte norteño, en ver las preciosas praderías que teníamos a nuestros pies, además de las sierras de La Escapa, Ordiales y Cuana , en lo alto, donde se ubican los vistosonos picos Mofrechu y Joyudongo.
(Cantu y depósito de agua, ± 4,2 K / 480 m.a. / 12:35 h.)
(Aquí tenemos La Cruz de Priena, debemos pasar todo por debajo hasta el collau de la izquierda)
Tras la parada “técnica” toca avanzar un poco más, se nos presenta una amplia imagen de la montaña sobre la cual queremos despedir el año, pero, por comodidad y seguridad, debemos cruzar por toda la base de la Cruz de Priena, desde las cabañas de Monte Orientes a las de Uporquera, de Oeste a Este, vamos a seguir por cómoda pista. En una de las ocasiones que por aquí pasamos afrontamos la subida como vamos a realizar ahora, por la ladera Oriental de la Cruz de Priena, desde Uporquera, y bajamos por donde ahora nos encontramos, aunque esto solo son historias que cuento a los guajes para que se ilustren un poco, en este recorrido alternativo el terreno resulta mucho más incómodo de caminar, por lo que seguimos la buena traza de La Frassinelli.
(Cabañas de Monte Orientes, ± 4,5 K / 490 m.a. / 12:45 h.)
(Con cierto relax vamos avanzando inmersos en animadas conversaciónes)
Cruzamos la base de la montaña con pequeñas subidas, dejandonos llevar, siguiendo la señalización, observamos guapos y ancestrales detalles, como el “cebatu” en alguna de las cabañas de la zona de La Piniella, lo que da lugar a realizar alguna que otra parada para charrar sobre este tema u otros.
(Artesanales detalles observando a nuestro paso, como el "cebatu" de esta vieja cabaña)
(Cabañas de La Paniella, ± 4,7 K / 500 m.a. / 12:50 h.)
Pasamos la cabañas de La Pandiella y un nuevo horizonte montañero se abre ante nosotros, seguimos teniendo una excelente panorámica de la sierra del Cuera, la cual, ahora, nos parece mucho más cercana, pero estamos girando poco a poco al SurOeste y ante nosotros aparecen los grandes picos, en principio tímidamente, pero poco a poco los iremos viendo como crecen, especialmente los más próximos, los de la zona del Gamoneu, como la Peña Ruana y compañía, donde nace el río Casaño.
(La sierra del Cuera sigue muy presente, incluso parece que la podemos tocar)
(Todo El Cuera: Desde Peña Blanca a las dos cumbres del Turbina y continua)
(Ya poniendo rumbor Sur, aparecen las blanca cumbres de Los Picos de Europa, aunque aún es pronto)
No demos seguir distrayéndonos mucho, ya tenemos a la vista las cuidadas cabañas de Uporquera y tenemos que centrarnos, aquí, definitivamente debemos abandonar la “Senda Frassinelli” girando a la derecha, mal que le pese al compañero Alf, no hay señalización alguna que indique cual es al camino que va a La Cruz de Priena, aunque no estaría de más, pero ya sabemos cómo es esto de las señales: abundan cuando no hacen falta y cuando se necesitan… ¡no aparecen!
( Cabañas de Uporquera, ± 5,8 K / 550 m.a. / 13:10 h. / Desvios de caminos)
¡Advertidos estamos!, debemos de olvidarnos de la senda hormigonada que baja y continua por la que tira para arriba hacia las cabañas, además que parece lógico ya que si hacemos lo primero perderíamos de vista la arista de la montaña que debemos subir.
(Nos olvidamos de "La Frassinelli" que continúa por debajo de nosotros)
Ya al pie de las guapas cabañas de Uporquera y sus murias solo tenemos que rodearlas por la izquierda y subir al collau el Pasadero que nos dará la vista hacia el otro valle, hacia la zona del Monte Auseva y Covadonga, una vez en el, a unos 600 metros de altitud solo queda virar a la derecha, al Oeste, y ponerle cara a La Cruz.
(Rodeamos las cabañas y la murias por la izquierda y directos al collau el Pasadero)
(Collau el Pasadero, ± 6,2 K / 600 m.a. / 13:30 h.)
Alcanzado el collau, las vistas hacia Covadonga, hoy, en este mes invernal, no son muy buenas, el sol está muy bajo nos pega en los ojos, por lo que no vemos gran cosa, casi todo está en la penumbra. Sin embargo, si miramos hacia el Sur tenemos unas impresionante panorámicas del macizo Central y Occidental de los Picos de Europa y, según nos vamos acercando al perro guardián de las ovejas de Priena, es decir, según vamos subiendo, mejoramos en vistosidad, de tal manera que, en los últimos cientos de metros, la marcha se relentiza por culpa de las distracciones montañeras.
(En los últimos cientos de metros la marcha se relentiza por culpa de las distracciones)
(Por la derecha tenemos casi todo el Macizo Occidental)
(Y por la izquierda asoma parte del Central, especialmente El Torrecerredo)
La juventud, ajena a nuestras distracciones va delante sin pararse a contemplar mucho, así es que los tenemos que frenar un poco, justo a la altura de donde debemos tomar el camino que nos baje de la montaña en dirección a Covadonga por las Cuestas de Ginés. Aunque tampoco no hacen mucho, ellos quieren llegar los primeros a la cumbre, ¡faltaría más!
(Transitando entorno a un jito importante de recorrido, por donde debemos bajar después)
Con cierta tranquilidad, cubriendo nuestras espaldas la guapa estampa de la Sierra del Cuera, tras dos horas y siete kilómetros de marcha, tras superar 630 metros de desnivel positivo, alcanzamos la cumbre propuesta, lo cual siempre es motivo de satisfacción, por modesta que sea la cima conquistada.
(Cruz de Priena, ± 7,0 K / 725 m.a. / 13:45 - 15:15 h.)
Como casi todos los que ya saben lo que les espera cuando llegan a tocar con sus manos el frío metal de La Cruz de Priena, lo primero que hacemos es mirar hacia “La Santina”, hacia abajo, donde está la Santa Cueva y la Basílica de Covadonga y nosotros rápidamente miramos, incluso los que varias veces por este hecho hemos pasado en varias ocasiones.
(Los nuevos y veteranos hacia Covadonga miramos)
Tras el primer acto instintivo de saludar a “La Santina” toca hacerse la foto de grupo ante la gran cruz, la cual sustituyó a otra de madera que fue partida por un rayo. Parece que la idea de instalar la gran cruz metálica surgió del entonces párroco de Llaranes. Tal como vemos en un grabado realizado con puntos de soldadura se construyó en Aviles por Montajes del Tera e instalada por el G. M. Ensidesa en 26 de mayo de 1963.
(Tras la marcha andariega toca hacerse la foto protocolaria)
Tras la protocolaria foto de cumbre tocaba hacer recuento de belenes, hasta once creo que contaron Alex y Mary a la limón, unos pequeños y otros un poco más grandes pero todos igual de guapos. Como dejar una foto de cada uno de ellos sería un poco cansin, dejamos una foto de uno de ellos, no tomada al azar precisamente, pues ocupaba la misma ubicación que el que nosotros instalamos en el año 2009.
Tras la foto de cumbre ante la gran cruz y el recuento de belenes vinieron las viandas, tocaba comer el bocata y tras él llegaron los dulces navideños: los polvorones artesanos del compañero Alf, el turrón de Angel, la sidra porteada por Manolo y Celso, etc… No faltaron ni las famosas palmeritas de chocolate del compañeru Alf, el caso es que sobró material, para casa volvimos con cosas que no llegamos a sacar de las mochilas.
(Hora del bocata....)
(... y demás viandas navideñas)
Brindamos por todos, por los que allí estábamos y por los ausentes, para nosotros todos igual de importantes, esperando que el próximo año, todos estemos en otra guapa cumbre despidiendo el año y deseando lo mejor para el siguiente.
Realmente tuvimos un fallo, ¿Cuál?, -Pues, que faltó cantar un villancico, qué vergonzosos fuimos, nadie hizo un atisbo de intentarlo, esperamos que el próximos encuentro no vuelva a pasar los mismo, me acordaré de pasar la letra de uno de ellos para que no existan disculpas.
En la sobremesa montañera nos relajamos un poco más, seguimos charrando un poco de nuestros temas y preocupaciones, como el futuro de nuestros hijos y nietos, pues alguno de los allí presente tenía una representación.
Como no podía ser de otra manera, también tocó la sesión de identificación de cumbres, así que no estaría bien no hacer mención fotográfica de algún detalle panorámico de las mismas, aunque nos olvidaremos de la vertiente Oeste, la luz solar nos impedía sacar alguna foto digna de mostrar, así que vemos las buenas:
(Casi todo Picos de Europa)
(La Sierra del Cuera)
(Sierra del Hibeu)
(Sierra del Benzúa)
(Sierras de La Escapa, Ordiales y Cuana)
(Sierra del Sueve)
Con tanta cumbre preciosa ante nosotros no quisimos marcharnos sin fotografiarnos todos con la espectacular colección de blancas cumbres de los Picos de Europa, además con un guapo contraste de colores: el azul del cielo y del mi polar, el verde rabioso de la alfombra de Priena, el blanco nieve de las cumbres, el amarillo del gabán de Oscar, el rojo de Mary, etc… Todos con cara sonriente de satisfacción, la verdad que aquello se parecía más a un arco iris que a otra cosa, pero ye que... ¡así somos de chulis!
Ya son más de las tres de la tarde y toca iniciar la segunda parte de la travesía propuesta, según la hoja de ruta marcada tocaba bajar hacia Covadonga por la vertiente SurOccidental de La Cruz de Priena, por lo que, tras revisar si habíamos dejado algo olvidado, volvemos unos metros sobre nuestros pasos acometidos en la última parte del ascenso.
(Es hora de iniciar la segunda parte de la travesía, así que volvemos unos metros sobre nuestros pasos)
(Realmente solo sería unos 400 metros coincidentes con el recorrido de subida)
A la subida ya lo habíamos visto, no tendríamos que deshacer mucho camino, unos 400 metros, ni perder mucha cota de desnivel, solo unos 25 metros, tras los cuales giramos a la derecha y nos olvidamos de bajar hasta el collau el Pasadero, ahora toca bajar en unos largos zig-zags, por las cuestas de Gines, hasta la zona inferior de la basílica de Covadonga, hasta el aparcamiento de Casa Asprón.
(Antes del Collau el Pasadero giramos hacia Covadonga, ± 7,4 K / 700 m.a. / 15:20 h.)
(En fila de a uno comenzamos a descender con mucho cuidado)
(El recorrido no tiene mucha historia, solo seguir la traza zzz)
(Cuestas de Ginés hacia Covadonga, ± 8,1 K / 585 m.a. / 15:35 h.)
El recorrido no tiene mucha historia, solo descender en fila de a uno, procurando no pegar patadas a las piedras, porque por debajo van nuestros compañeros u otros que puedan subir, así, con el Santuario como referencia, sin mucho problemas vamos perdiendo rápidamente cota, otra cosa sería subirlo.
(Seguimos haciendo el zig-zag, las famosas zzz)
Por la parte baja del camino nos encontramos a un grupo de nenos de un campamento, los que van delante ya les advierten de que es un poco tarde, que a la vuelta se les va hacer de noche, por lo que sería mejor desistir, además no llevan agua, les comentamos que la fuente que vimos no nos pareció apropiada para el consumo, pero ellos continúan. Cuando llegan a nuestra altura les volvemos a decir lo mismo, se lo piensan, nosotros seguimos el descenso y, al poco, ellos nos siguen, ¡bien!, mejor prevenir que lamentar.
(Covadonga - El Repelao, aparcamiento Casa Asprón, ± 10,6 K / 190 m.a. / 16:15 h.)
Tras una hora para descender unos 535 metros de desnivel y 3,5 kilómetros de longitud alcanzamos el objetivo, el aparcamiento de Casa Asprón, donde habíamos dejado el coche de Manolo, el que nos posibilitaría ir a por el resto de coches dejados por la mañana en Corao, mientras el resto del grupo se iría a tomar algo.
Mientras la mayoría del grupo subió hasta la zona de la Santa Cueva, los conductores, que íbamos al volante, nos fuimos hasta Corao repasando el mapa del día, el dibujo que nuestro GPS ha dibujado sobre el mapa, llamaba especialmente la atención los Siete kilómetros del ascenso y los tres del descenso, un fuerte contraste. Tras varios intentos de inicio y fin en el mismos emplazamiento habíamos realizado una guapa travesía, además en un día excelente, realmente no podíamos pedir más.
(Nuestra travesía por La Cruz de Priena / ‘© INSTITUTO GEOGRÁFICO NACIONAL DE ESPAÑA.2009’)
Ya todos juntos tomamos algo en un bar que existe en la parte alta, sobre la plaza de la oficina de información, desde allí teníamos una posición privilegiada para observar toda la montaña de La Cruz de Priena, su metálica señera y, en especial, los numerosos zig-zags, además los últimos rayos de sol de la tarde les daba un toque un tanto especial, tal era así que no me resisí a sacar otra guapa foto de grupo.
(En una posición privilegiada observamso la montaña que habíamos superado y sus zzz)
(Los cálidos colores de la tarde invitaban a sacar otra guapa foto de grupo)
(Angel, Gerardo, Alex, Alfonso, Oscar, Manolo, Gerardo, Celso, Mary, Félix y Arsenio)
No podíamos marchar del Simbólico lugar sin hacerle una vista a la nuestra “Santina”, la patrona de Asturias, así lo hicimos pero antes, donde se ubica la ventana de piedra con las tres cruces, donde tanta gente saca les fotos, visitamos un guapo belén, con animación luminosa. Después seguimos adentrándonos en la cueva hasta los pies de la virgen, a lado de la tumba de Pelayo, era el final de nuestro recorrido, entre la tumba de Pelayo inicial, en Abamía, a la actual en la Santa Cueva de Covadonga.
(Un guapo belén nos da la entrada en la Santa Cueva)
(Recorrido del día, desde la primera tumba de Pelayo en Abamía hasta la actual en Covadonga)
Dejamos atrás a la nuestra “Santina”, hubiera sido guapo ver caer con fuerza el chorrón de agua a los pies de la misma, pero parece que este invierno tan seco no es muy apropiado para ello, así que nos quedamos con las ganas de contemplar cómo se precipita el río Mestas desde la vega de Orandi. En compensación los nenos tuvieron lucubrando un buen rato de cómo sacar las perras que en el fondo del estanque estaban, cada loco con su tema.
Lo propuesto nos salió “redondo”, creo que mejor imposible, el precioso día que despertó ayudó mucho, aunque la excelente compañía más, estaba muy claro que con los buenos mimbres que teníamos haríamos un buen cesto y acabaríamos el día más que satisfechos, así que solo podemos terminar diciendo...
¡Otro más y mejor!
JFCamina
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